Adipocitos

Los adipocitos, también conocidos como lipocitos y células de grasa, son las células que componen principalmente el tejido adiposo, especializado en el almacenamiento de energía en forma de grasa.

Hay dos tipos de tejido adiposo, el tejido adiposo blanco y el tejido adiposo marrón, que también son conocidos como grasa blanca y grasa marrón respectivamente, y hay, por lo tanto, dos tipos de adipocitos diferentes que los forman.

Tipos de adipocitos

Adipocitos blancos:

Los adipocitos que forman el tejido adiposo blanco contienen una gota grande de lípido rodeada por una capa de citoplasma. El núcleo es aplanado y situado en la periferia.

La grasa almacenada está en un estado semi-líquido, y se compone principalmente de triglicéridos y ésteres de colesterol.

Las células de grasa blanca secretan muchas proteínas como la resistina, adiponectina, leptina.

Adipocitos marrones:

Son de forma poligonal. A diferencia de las células de grasa blanca, estas células tienen un citoplasma considerable, con gotitas dispersas de lípidos.

El núcleo es redondo, y, aunque situado excéntricamente, no está en la periferia de la célula.

El color marrón proviene de la gran cantidad de mitocondrias.

También conocida como «grasa de bebé», se utiliza para generar calor.

Funciones endocrinas de los adipocitos

Los adipocitos pueden sintetizar estrógenos a partir de andrógenos, potencialmente la falta de peso o el sobrepeso son factores de riesgo para la infertilidad.

Además, los adipocitos son responsables de la producción de la hormona leptina. La leptina es importante en la regulación del apetito y actúa como un factor de saciedad.

Origen

Aunque el linaje de los adipocitos todavía no está claro, existen los llamados pre-adipocitos, fibroblastos no diferenciados que pueden ser estimulados para formar adipocitos.

Las células mesenquimales pueden diferenciarse a adipocitos, tejido conectivo, músculo o hueso.

El tejido conectivo areolar se compone de adipocitos.