Crisis del crecimiento bebés

¿Que son las crisis o brotes de crecimiento en el bebé? Durante la lactancia se dan las llamadas crisis o brotes del crecimiento en el bebé, los cuales son momentos en que la oferta suele ser mas grande que la demanda y se genera un desajuste. Esto puede ser tomado por la madre como un problema, como que el bebé se queda con hambre, que la leche «no le sirve» y un montón de mitos mas que no son reales. Este brote del crecimiento tiene que ver precisamente con el crecimiento del bebé.

Puede suceder que el bebé de repente se ponga inquieto cuando esta tomando el pecho, incluso que llore, corra su cara y la mueva, se muestre con ansiedad y que demande tomas con mucha mas frecuencia que antes, pero tomando menos cantidad de tiempo. Es posible que por esto la madre sienta que tiene los senos mas blandos, que no tienen la leche suficiente pero todo tiene que ver y es parte de este brote de crecimiento.

 

Crisis del crecimiento bebés

 

Todo esto sucede porque el bebé necesita que su madre tenga una producción distinta, incluso generando leche diferente, la cual no quiere decir que sea mejor que la que estaba produciendo actualmente y que no sirviera. No existe leche materna que sea mala o que no sirva. Esta nueva leche tiene todos los componentes que el bebé necesita en esta nueva etapa de crecimiento.

Por lo general estas crisis de crecimiento se suelen dar en los mismos meses en todos los bebés por lo cual son fáciles de identificar y poder entender que es lo que le sucede al bebé si tiene una actitud poco común cuando esta siendo amamantado. Estos brotes se dan por lo general a las 3 semanas después del nacimiento, al mes y medio del bebé y luego a los 3 meses de vida. Obviamente que esto siempre va a variar según el bebé y su mamá pero son momentos que se dan por lo general en todos los bebés en esos meses de vida.

Como mencionamos, la primera crisis es a las 3 semanas de vida aproximadamente, y por lo general se manifiesta por medio de un aumento de la demanda por parte del bebé. Hay madres que de un día al otro se encuentran con esto: no pasan mas de dos horas y el bebé quiere volver a realizar una toma, solo se calma si esta prendido al pecho y le cuesta dormirse (a diferencia de las semanas anteriores). Esta primera crisis hace que la madre comience a pensar muchas cosas como: que su leche no lo llena, que el bebé pasa hambre por ese motivo, que los pechos no producen como antes y están blandos, y algunas teniendo ideas o llegando a abandonar la lactancia por este motivo. Es una etapa estresante para la mamá por todo lo mencionado anteriormente pero es muy importante no perder la LME (Lactancia Materna Exclusiva) ya que no es por nada de lo mencionado anteriormente, sino que es por el propio brote de crecimiento.

El bebé se prende mas seguido al pecho porque es la única forma en que la madre puede comenzar a generar mas leche. Los pechos no son un lugar de almacenamiento en donde siempre hay stock, se debe reponer y generar mas leche, y la única forma es: a mas succión mas producción.

Este primer brote dura pocos días, unos 3 o 4, y una vez que se pasa este tiempo y si se dio pecho a demanda por lo general la lactancia vuelve a normalizarse generando lo que el bebé precisa.

Como mencionamos anteriormente, la segunda crisis se da al mes y medio del bebé, y es por el mismo motivo: necesita mas leche, por lo cual aumenta la demanda.

El bebé puede tener una forma de actuar diferente ya que puede mostrarse inquieto, ansioso, se puede mover, saltar, prenderse y desprenderse del pecho, estar tenso, arquear la espalda, llorar, cinchar el pezón, mover su cabeza, como que no le gustara estar prendido al pecho, dando la sensación de que se «pelea» con el. Al igual que la crisis de la semana numero 3, todo vuelve a ser como antes en cuestión de días (1 semana), volviendo a generarse la cantidad que se necesita y teniendo tomas mas espaciadas.

A los tres meses de vida vuelve a reaparecer esta crisis, pero es diferente a las otras ya que: el bebé no quiere tomar tan seguido y cuando lo hace las tomas duran menos tiempo, se suele distraer cuando esta tomando, llora, y como consecuencia de esta crisis aumenta menos de peso que lo que venia aumentando. Puede mojar menos pañales que antes y chuparse los dedos de las manos, lo cual siempre se interpreta como hambre pero en este caso no es así.

Queremos contarte que esta crisis es igual que las anteriores, por lo cual se puede superar y continuar con la lactancia como se hizo normalmente. Un bebé que tiene 3 meses ya no es un recién nacido, por lo cual ahora tiene la capacidad de tomar mas cantidad de leche en menos cantidad de tiempo, lo que no es sinónimo de que no quiera el pecho.

Es normal que se distraiga cuando esta tomando el pecho, e incluso ante la escucha de la voz materna o paterna, con la tele, radio y que se detenga entre toma y toma para sonreír. Puede llorar cuando esta tomando el pecho, la madre puede sentir que no le baja suficiente leche, o que el bebé no puede sacar lo que necesita pero esto es porque las glándulas mamarias ya están preparadas para brindar mas cantidad de leche si el bebé lo necesita, por lo cual con solo unos minutitos de succión por parte del bebé ya se esta produciendo con facilidad el reflejo de eyección.

Los pechos no están vacíos, porque se suele pensar eso debido a que no se siente la bajada de la leche, los pechos no están hinchados o ya no se chorrean como antes, pero el tema es que la leche se produce gracias a la demanda del bebé como explicábamos anteriormente.