Los ejercicios aerobicos son ejercicios físicos de intensidad relativamente baja que dependen principalmente de la respiración.
Aeróbico significa literalmente «vivir en el aire», y se refiere a la utilización de oxígeno para satisfacer adecuadamente las demandas de energía durante el ejercicio a través del metabolismo aeróbico.
Generalidades de los ejercicios aerobicos
Inicialmente aumentado durante el esfuerzo, el glucógeno muscular se rompe para producir glucosa, y cuando los niveles de glucógeno en el músculo comienzan a caer, el metabolismo de la grasa se aumenta de modo que pueda alimentar las vías aerobias.
El ejercicio aeróbico puede ser alimentado por las reservas de glucógeno, las reservas de grasa, o una combinación de ambos, dependiendo de la intensidad.
Los principales músculos en un descansado humano no entrenado normalmente contienen suficiente energía para alrededor de 2 horas de ejercicio vigoroso.
Formas de ejercicios aerobicos
El ejercicio aeróbico comprende innumerables formas. En general, se lleva a cabo a un nivel moderado de intensidad durante un periodo de tiempo relativamente largo. Por ejemplo, correr una larga distancia a un ritmo moderado.
Jugar al tenis singles, con casi continuo movimiento, generalmente se considera una actividad aeróbica, mientras que si se trata de dos equipos, o al golf, con breves estallidos de actividad interrumpidos por descansos, no puede ser un ejercicio predominantemente aeróbico.
Es muy común que los ejercicios aeróbicos se realicen para involucrar a los músculos de las piernas, principal o exclusivamente.
Por ejemplo, el remo a una distancia de 2.000 metros o más es un deporte aeróbico que ejercita varios grupos musculares principales, incluidos los de las piernas, abdominales, pecho y brazos.
Beneficios de los ejercicios aerobicos
Fortalecimiento de los músculos implicados en la respiración, para facilitar el flujo de aire dentro y fuera de los pulmones.
Fortalecer y ampliar el músculo cardíaco.
Fortalecimiento de los músculos de todo el cuerpo.
Mejorar la eficiencia de la circulación y reducir la presión arterial.
Aumento del número total de células rojas, facilitando el transporte de oxígeno.
Mejoramiento de la salud mental, incluyendo la reducción del estrés y la reducción de la incidencia de la depresión.
La reducción del riesgo de diabetes.
Quemaduras de grasa corporal, y construcción de músculo magro.
Como resultado, el ejercicio aeróbico puede reducir el riesgo de muerte debido a problemas cardiovasculares.
Además puede estimular el crecimiento óseo, así como reducir el riesgo de la osteoporosis tanto para hombres y mujeres.
Además de los beneficios del ejercicio aeróbico, hay numerosos beneficios de desempeño, entre otros:
Aumento de las moléculas de almacenamiento de energía, tales como grasas y carbohidratos dentro de los músculos, lo que permite aumentar la resistencia.
La mejora de la capacidad de los músculos para utilizar las grasas durante el ejercicio, la preservación de glucógeno intramuscular.
Cuando la condición física general es un requisito profesional, el ejercicio aeróbico por sí solo no puede proporcionar un programa de ejercicios bien equilibrado.
Sin embargo, como componente importante y ademas beneficiosos para la salud cardiovascular, siguen siendo fundamentales los ejercicios aerobicos.