Enfermedad hepatica alcoholica

La enfermedad hepatica alcoholica es un término que abarca las manifestaciones hepáticas de consumo excesivo de alcohol, como hígado graso, hepatitis alcohólica y la hepatitis crónica con fibrosis o cirrosis hepática.

Es la principal causa de enfermedad hepática en los países occidentales.

Factores de riesgo de la enfermedad hepatica alcoholica

La cantidad de alcohol tomada:

El consumo de 60-80g por día (alrededor de 75-100 ml / día) durante 20 años o más en los hombres, o 20g/día (alrededor de 25 ml / día) para las mujeres aumenta significativamente el riesgo de hepatitis y fibrosis un 7 a un 47%.

Patrón de consumo de alcohol:

Beber fuera de las comidas aumenta hasta 2,7 veces el riesgo de la enfermedad hepatica alcoholica.

Sexo:

Las mujeres son dos veces más susceptibles a la enfermedad hepática relacionada con el alcohol, y pueden desarrollar enfermedad hepatica alcoholica con menor duración y dosis de consumo crónico.

La infección por hepatitis C:

Una infección concomitante por hepatitis C acelera significativamente el proceso de daño hepático.

Factores genéticos:

Los factores genéticos predisponen tanto al alcoholismo como a la hepatopatía alcohólica.

Dieta:

La desnutrición, las deficiencias de vitamina A y E en particular, puede empeorar el daño inducido por el alcohol impidiendo la regeneración de los hepatocitos.

Fisiopatología de la enfermedad hepatica alcoholica

El hígado graso

La esteatosis es la acumulación de ácidos grasos en las células del hígado.

El alcoholismo causa el desarrollo de grandes glóbulos de grasa a través del hígado y puede comenzar a ocurrir después de unos días de consumo excesivo de alcohol.

Aunque la esteatosis se desarrollará en toda persona que consume una gran cantidad de bebidas alcohólicas durante un largo período de tiempo, este proceso es transitorio y reversible

La hepatitis alcohólica

La hepatitis alcohólica se caracteriza por la inflamación de los hepatocitos.

Si bien el desarrollo de la hepatitis no está directamente relacionado con la dosis de alcohol, algunas personas parecen ser más propensas a esta reacción que otras.

Cirrosis

La cirrosis es una etapa tardía de la enfermedad hepática grave marcada por la inflamación (hinchazón), fibrosis (endurecimiento celular), que termina en la cicatrización y la necrosis (muerte celular).

Las complicaciones tardías de la cirrosis son la hipertensión portal, trastornos de la coagulación, ascitis y otras complicaciones, incluyendo la encefalopatía hepática y el síndrome hepatorrenal.

Sin abstinencia total de consumo de alcohol, con el tiempo dará lugar a insuficiencia hepática, otra complicación de esta enfermedad hepatica alcoholica.