Según la antropóloga Katie Hinde, quien es profesora de “Biología de la Evolución Humana” de la “Universidad de Harvard”, quien ha realizado una investigación acerca de la lactancia y cuál es la composición de la leche (viéndolo en diferentes especies animales).
De esta manera se pudo observar que en algunas madres se da una producción mayor de leche cuando la cría que va a nacer es una hembra, y menos leche cuando es macho. Y a esto se suma que la composición de la leche es distinta también según el sexo de la cría por nacer.
El alimento juega un papel muy importante, se destaca en el desarrollo del sistema nervioso del niño. La leche también es decisiva en la colonización con bacterias que se da en el sistema digestivo de los niños, esto impactando en el metabolismo futuro.
En cuanto a la salud de las madres y según un estudio de la «Universidad de Illinois» se demostró que aquellas madres que nacieron con bajo peso, al estar embarazadas tuvieron una placenta delgada, lo que hace que le puedan pasar más rápido los nutrientes al hijo que esta por nacer. Esto hace que se vea favorecido el desarrollo cerebral del niño, mas que nada en los últimos meses de gestación.
Cuando nace el hijo, el padre por lo general experimenta una disminución de su testosterona y tienen un aumento de la prolactina, lo que hace que se vea facilitado su apego con el niño. Es por esto que se dice que la biología prepara al padre para que haga su aporte en la crianza del niño.