Síndrome de Asperger

El síndrome de Asperger es un trastorno del espectro del autismo que se caracteriza por importantes dificultades en la interacción social, junto con los patrones restringidos y repetitivos de comportamiento e intereses.

Se diferencia de otros trastornos del espectro autista por su preservación relativa de desarrollo lingüístico y cognitivo. Aunque no es necesario para el diagnóstico, la torpeza física y el uso atípico del lenguaje son frecuentes.

La causa exacta se desconoce, aunque la investigación apoya la probabilidad de una base genética; Técnicas de imágenes cerebrales no han identificado una patología común clara, además no existe un tratamiento único, y la efectividad de las intervenciones en particular se apoya en datos limitados

Características principales
Como trastorno generalizado del desarrollo, el síndrome de Asperger se caracteriza por un patrón de síntomas más que un solo síntoma. Se caracteriza por una alteración cualitativa de la interacción social, por patrones estereotipados y restringidos de comportamiento, actividades e intereses, y no hay retraso clínicamente significativo en el desarrollo cognitivo o en el lenguaje.
A diferencia de las personas con autismo, las personas con Asperger no suelen ser retirados e introvertidos alrededor de otros, se acercan a los demás, aunque torpemente. Sin embargo, no todos los individuos se acercarán a otros. Algunos de ellos incluso pueden mostrar mutismo selectivo, no hablando en absoluto a la mayoría de la gente y excesivamente a determinadas personas. Algunos pueden optar por hablar sólo a las personas que les gusta.

Diagnóstico


Los
criterios estándar de diagnóstico requieren deterioro en la interacción social y patrones repetitivos y estereotipados de comportamiento, actividades e intereses, sin retraso significativo en el lenguaje o el desarrollo cognitivo.
El diagnóstico es más común entre las edades de cuatro y once años. Una evaluación integral que involucra un equipo multidisciplinario observa a través de múltiples configuraciones e incluye una evaluación neurológica y genética, así como pruebas para la cognición, la función psicomotora, funcion verbal y no verbal; el estilo de aprendizaje, y habilidades para la vida independiente.

Tratamiento

El tratamiento ideal coordina terapias que abordan los síntomas principales del trastorno.

El tratamiento se asemeja a la de otros trastornos del espectro autista, salvo que se tenga en cuenta las capacidades lingüísticas, y los puntos fuertes verbales y no verbales  e incluye generalmente:

• La terapia cognitivo-conductual para mejorar el manejo del estrés en relación con las emociones de ansiedad.
• Medicamentos para enfermedades coexistentes, como el trastorno depresivo mayor y trastorno de ansiedad.

• Terapia ocupacional y física para ayudar con la integración sensorial y la coordinación motora.

• La formación y el apoyo de los padres, sobre todo en técnicas de comportamiento para el uso en el hogar.