Según un artículo publicado en la revista “Cell Stem Cell”, el ayuno periódico durante 2 o 3 días ayuda a la regeneración de células madre sanguíneas y a restaurar el sistema de inmunidad, ayudando a neutralizar los efectos del envejecimiento y en casos de quimioterapia.
Este estudio fue encabezado por Valter Longo, quien es de origen genovés y es profesor de gerontología y ciencias biológicas en la “Universidad del Sur de California”, el cual indicó lo siguiente: «cuando uno ayuna, el sistema trata de ahorrar energía». A esto agregó: «Y una de las cosas que puede hacer para ahorrar energía es reciclar muchas de las células de inmunidad que no necesita, especialmente las que puedan estar dañadas».
En el caso de la quimioterapia, la cual es administrada a pacientes que tienen cáncer tiene un efecto muy positivo que es la posibilidad de salvar la vida de esos pacientes, pero trae consigo muchos efectos secundarios y uno de ellos es la merma de las células del sistema de inmunidad.
En un porcentaje, se calcula que más de un 20% de las muertes a causa del cáncer se dan a causa o se aceleran por los efectos tóxicos que tiene la quimioterapia, y no tanto por el cáncer en sí.
Es por este motivo que los médicos limitan la frecuencia y dosis de la quimioterapia, llegando a niveles que pueden ser tolerados por los pacientes con cáncer. Aún sin la quimioterapia el envejecimiento normal estropea el sistema de inmunidad, teniendo un riesgo mayor de desarrollar leucemia, u otras enfermedades variadas.
En la actualidad no existen formas de aminorar los efectos secundarios que tiene la quimioterapia sobre el sistema inmunitario o que ayuden a precaver la disfunción celular que está ligada al sistema de inmunológico que va de la mano con el envejecimiento.
Según estudios realizados anteriormente por Longo y su equipo, se logró indicar que una limitación temporal de la nutrición podría ayudar a aumentar la resistencia de las células madre a algunos factores asociados al estrés.
La investigación más reciente se realizó como una búsqueda para ver si el ayuno tiene alguna forma de protección hacia las células del sistema inmunológico.
Cuando se hace un ayuno continuo, se reduce la enzima PKA, la cual según expresa Longo: “es el gen clave que debe apagarse para que las células madre pasen a la modalidad regenerativa».
El ayuno continuo hace que el organismo se fuerce por consumir las reservas que tiene de grasa, glucosa y de cetonas, y también separa una parte significativa de células blancas de la sangre. Según Longo, esto se compara con sacarle a un avión el exceso de carga que lleva.