Es difícil estar inmersos en una sociedad en la cual se exige cierta imagen estética de delgadez, y en realidad lo que se ve es que día a día crece el sobrepeso u obesidad, acompañados por enfermedades que esto conlleva.
La verdad es que no es fácil, más bien es difícil tener la mejor forma, poder llegar al peso y talla que deseamos. Muchas veces los consejos que recibimos son de utilidad, pero más que nada obstaculizan este difícil proceso de bajar de peso.
Según Aranzazú Aparicio, quien es profesora titular en el «Departamento de Nutrición de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid», el secreto de perder ese peso de más que tanto nos incomoda y nos hace mal, esta en mantener una dieta equilibrada y variada, reduciendo un poco el tamaño de la ración que estamos comiendo y siempre hacer ejercicio.
A veces sucede que haces todo pero que no logras conseguir tu meta, esto es debido a que hay cosas que te lo están impidiendo, aquí te nombramos algunas:
1) Tu único plato es una ensalada: las ensaladas son ricas en agua, pero son pobres en proteínas, hidratos de carbono y grasas, haciendo obviamente que las personas no engorden.El tema esta en que no pasa mucho tiempo hasta que el hambre nos invade y este es el punto negativo.
2) Armar un tiempo fijo para perder esos kilos: según Elena Piñeiro, quien es dietista-nutricionista es necesario que el organismo tenga un tiempo para reorganizarse metabólicamente y que sobretodo sea un adelgazamiento consolidado, que se mantenga y no estemos subiendo y bajando. El objetivo no va en tener que cumplir con determinado numero de semanas que nos sacrificamos, sino que va en cambiar nuestros hábitos.
3) Evitar por completo el pan y la pasta: no se debe descartar el consumo de pasta y de pan, con consumirlos moderadamente y tratando de no mezclarlo con otros alimentos que sean ricos en grasas ya es suficiente.
4) Consumir casi siempre alimentos que son bajos en calorías o light: según lo indica Aranzazú Aparicio, es cierto que estos alimentos brindan menos calorías que los comunes, pero si se consumen ambos en igual proporción, ya que algunos alimentos bajos en calorías o light contienen una alta cantidad de azúcares y grasas, y también aditivos (necesarios en su proceso de elaboración)
5) Pecados: se sigue una dieta saludable pero los fines de semana por ejemplo, te das lujos que contienen mucha grasa y calorías o tomas alcohol en exceso. Muchas veces no sabemos que fuente de calorías “extra” son los refrescos o jugos que consumimos.
6) Cuidar lo que se come, pero olvidando lo que se siente: ¿con esto que queremos decir? que tanto el control sobre la alimentación sana, estos nuevos hábitos sanos, tener un dominio en referencia a lo que compramos e ingerimos, hacer ejercicio físico, entre otras cosas, hacen que nuestra autoestima se vea reforzada, es decir que crezca.
Se trata de una rueda, en la cual va creciendo el amor por uno mismo y el aceptarnos, obviamente contribuyendo en nuestro bienestar emocional. Esto es difícil, por lo cual si se carece de ella, es cuando aparecen ciertas «crisis personales» que claramente influyen en nuestros hábitos alimenticios y como consecuencia se da la ansiedad.
Para finalizar queremos decirte que siempre es conveniente consultar con un médico antes de comenzar a cuidarte o hacer una dieta, ya que el sabrá aconsejarte y realizar algún estudio médico si es necesario.