Efectos secundarios de los corticoides

Efectos secundarios de los corticoides

Los corticoides son una variedad de hormonas que pertenecen al grupo de los esteroides (es decir son producidas por la corteza de las glándulas suprarrenales) y sus derivados.

Los corticoides destacan por estar implicados en una amplia variedad de mecanismos fisiológicos del organismo, incluyendo aquellos que se encargan de regular las inflamaciones, también el sistema inmunitario e incluso el metabolismo de los hidratos de carbono, además del catabolismo de proteínas, de los niveles electrolíticos en plasma y, finalmente, también los que caracterizan la respuesta frente al estrés.

Los corticoides pueden ser sintetizados en forma artificial y tienen algunas aplicaciones a nivel terapéutico, utilizándose más que nada debido a sus varias propiedades antiinflamatorias y también inmunosupresoras, además de sus efectos sobre el metabolismo.

Los efectos secundarios de los corticoides pueden aparecer en dos casos: primero que nada por el uso continuado de dosis grandes del fármaco, o bien luego de la supresión después de que se haya estado consumiendo durante períodos de tiempo considerables y sin ningún tipo de descanso.

Los efectos secundarios notables a nivel estético pueden incluir:

Aumento del vello en los brazos y en las piernas.
Cara de luna llena y joroba de búfalo.
Aparición de estrías que son similares a las estrías gravídicas.
Aumento de peso (más que nada con dosis de más de 7,5mg)
Aparición de hematomas a nivel de la piel debido a roces incluso insignificantes.
Acné.

Uno de los efectos secundarios más destacado de este fármaco es el cambio de carácter, aunque también pueden producir otros efectos a nivel psicológico tales como irritación, intranquilidad, confusión, depresión, falta de concentración e incluso insomnio.

Otros efectos secundarios que se han observado son:

Sistema digestivo: pueden aparecer hemorragias digestivas y ulcus gástrico.
Casos de diabetes: el consumo de corticoides aumenta la posibilidad de que se produzca una tendencia a la elevación de la glucemia, principalmente en aquellas personas que son diabéticas o bien que tienen glucemias basales alteradas.
Crecimiento: algunos opinan que los corticoides poseen un efecto directo sobre el hueso hipotálamo-epifisario y sobre el cartílago, actuando incluso sobre los condrocitos del cartílago de crecimiento, lo cual puede llegar a interferir su normal desarrollo.
Riesgos cardiovasculares: los corticoides favorecen a la hipertrigliceridemia, también a la hipercolesterolemia e incluso al aumento de la presión arterial del sujeto, fenómenos que producen un aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares. Es debido a esto que se recomienda realizar controles periódicos y en caso de ser necesario un tratamiento adecuado.