Nadie ha descubierto aún de que especie silvestre derivan las habas que hoy en dia comemos, y ya que se puede cruzar con especies silvestres conocidas, significa que han de ser una mezcla.
La “domesticación” y cultivo manual de las habas probablemente ocurrió en la región oriental del Mediterráneo, pero exactamente cuando y donde sigue siendo un misterio. Restos de semillas se han encontrado en una excavación arqueológica cerca de Nazaret en el norte de Israel que datan de 6800-6500 A.C.
Esta temprana adquisición se debe a que el haba tiene la ventaja de ser tolerante a las heladas y otras variantes del clima
Las habas fueron la fuente principal de proteínas para los países de Asia y los países mediterráneos por mucho tiempo, ya que tienen un contenido en proteínas alto, cerca de 20-25%.
Beneficios para la salud de las habas
Siempre se ha sabido que las habas son nutritivas, pero en realidad son mucho más que eso.
- Retiran el colesterol del cuerpo
- Disminuyen el riesgo de enfermedad cardiaca en un 20% a los 5 años.
- Proporcionan una fuente importante de fibra soluble.
- Los que sufren de diabetes también son beneficiados por el consumo de habas, ya que estas ayudan a crear más los receptores de insulina.
- Las habas son ricas en Isoflavina, que mantienen las células normales, e impiden que se vuelvan cancerosas.
- Las habas también llenan muchas necesidades alimenticias, incluyendo por porción 32% de de folato, 9% de potasio, y son muy ricas en proteínas y fibra y además bajas en grasa.