Hipo

hipo

El hipo es considerado un reflejo respiratorio caracterizado por una serie de contracciones espasmódicas de inspiración.
El hipo más común es momentáneo y completamente inofensivo; y más a menudo asociado con la dilatación del estómago, cerca del diafragma, después de una comida pesada o que se ingiere demasiado rápido.

Puede, en ciertos casos, llegar a ser perjudicial. El hipo «crónico» puede prolongarse durante varias semanas, meses o años. Sin embargo, estas situaciones son muy poco frecuentes y, en la mayoría de los casos, consecuencias de los intestinos o los nervios.

Bases del hipo

El sistema de órganos humanos «tocado» por el hipo es principalmente el respiratorio.
En el momento de inspiración, el diafragma, musculo inspiratorio principal, se contrae produciendo un aumento en el tamaño de la caja toraxica y provocando que los pulmones se llenen de aire. Durante la espiración, el diafragma se relaja, se levanta y pone presión en los pulmones que se vacían de aire.

El hipo consiste en una sucesión de contracciones súbitas e involuntarias de los músculos inspiratorios. Hay una inspiración súbita de aire seguido por una constricción de la glotis, que es quien controla la entrada de aire en la tráquea, y que se bloquea aproximadamente 35 milisegundos después de la contracción del diafragma. El aire es más lento y tiene problemas para entrar en la tráquea y los pulmones, causando una molestia y una vibración de las cuerdas vocales con el ruido característico del hipo gutural.

Tipos y causas de hipo

Suelen distinguirse tres tipos de hipo:
Hipo agudo: el más común, que por lo general sólo dura unos pocos minutos.
Hipo persistente: dura más de 48 horas.
Hipo refractario: dura más de un mes.

El hipo de tipo agudo es el más común. Es totalmente inofensivo. Sin embargo, lo mejor es consultar a un médico si es demasiado frecuente.

La distensión del estómago es la causa más común. Ello puede causarlo una comida ingerida demasiado rápido, la aerofagia (tragar aire al comer), el consumo excesivo de bebidas gaseosas o alcohólicas, una comida demasiado caliente o demasiado fría.

Hay también causas vinculadas a cambios de humor, estrés o emociones fuertes. En los niños, el hipo puede surgir durante o después de un ataque de llanto.

Los hipos de tipo persistente y refractario se consideran perjudiciales.
Sus causas se vinculan generalmente a ciertas enfermedades que pueden causar la irritación del nervio frénico o del nervio vago.
El hipo puede ser un signo. Cuando una persona sufre de un hipo crónico, los análisis de sangre y todo tipo de otras investigaciones son necesarios para permitir la identificación, por ejemplo, de diabetes o insuficiencia renal.

Otros factores que producen hipo

• Comer en exceso
• Alcohol
• Cambios bruscos de temperatura
• Bebidas gaseosas, alcohol, pan seco, y algunos alimentos picantes
• El consumo de tabaco (nicotina)

Tratamiento del hipo

Para evitar el hipo hay que acostumbrarse a comer más despacio, menos copiosamente y disminuir el consumo de alcohol o cigarrillos.
Beber un vaso de agua sigue siendo una de las mejores formas de detener rápidamente el hipo de tipo agudo, mientras que el hipo de tipo perjudicial, debe ser tratado en consideración al trastorno subyacente.

El tratamiento médico es a veces necesario en los casos de hipo crónico.
Numerosos remedios médicos existen, como el baclofeno, la clorpromazina, la metoclopramida, la gabapentina, y varios inhibidores de la bomba de protones. Un tratamiento simple consiste en aumentar la presión parcial de CO2 de la actividad del diafragma y contener la respiración o reinhalación en una bolsa de papel. La estimulación del nervio vago puede mejorar el hipo, en cuyo caso en su casa puede tragar pan seco o hielo picado, o estimular el reflejo nauseoso, aunque esto parece desagradable; detendra el hipo