La consuelda, un buen cicatrizante

consuelda

La consuelda crece en lugares húmedos, siendo originaria de Europa, La raíz es perenne, fibrosa y carnosa. Su tallo es fuerte, velludo y puede alcanzar hasta 1 m de altura. Las hojas cercanas a la raíz son lanceoladas, grandes y de borde ondulado. Las flores crecen en racimos y son de color blanco, rosado o violáceo, con forma de campana. La raíz se recolecta en otoño y primavera.

Cómo y para qué se utiliza

Acción cicatrizante: la raíz por vía externa en infusión, tintura o cataplasma ayuda a cicatrizar heridas

Acción expectorante: por otra parte la raíz y las hojas en infusión (tomadas bajo control del especialista) sirven para aliviar la tos, las andinas, la faringitis y los flemones para ello colocar las hojas calientes y sujetarlas bien con una gasa, cambiar la cataplasma cada 2 o 3 horas y aplicar tantas veces como sea necesario.

Cataplasma para secar forúnculos:

Ingredientes:

1 puñado de hojas de consuelda

200 cc de agua

Preparación y forma de aplicarla :

l. Cortar las hojas y ponerlas en un recipiente.

2 Añadir el agua

3 aplicar