Con el término nervios o “nerviosismo” se designa un estado emotivo típico caracterizado por una hipersensibilidad ante los estímulos dando lugar a una exageración de las respuestas de comportamiento físicas y mentales.
Una Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica realizada el año pasado en 6 países diferentes sugiere que el 15% de la población sufrirá de nervios en algún momento de su vida.
Síntomas del nerviosismo
- Inquietud o sentirse agitado
- Fatigabilidad fácil
- Dificultad para concentrarse o tener la mente en blanco
- Irritabilidad
- Tensión muscular
- Alteraciones del sueño
- Palpitaciones
- Transpiración
- Temblores
- Asfixia
- Sensación de ahogo
- Dolor de pecho
- Náuseas
- Entumecimiento o sensación de hormigueo
- Escalofríos
Tratamiento de los nervios
La medicina convencional puede funcionar bien para el problema a corto plazo, pero no es muy eficaz para la gestión a largo plazo por un problema de nerviosismo. Las Benzodiacepinas y los ansiolíticos así como los beta bloqueantes pueden ser ineficaz para la gestión a largo plazo de los nervios. El tratamiento de elección para el problema de ansiedad es la terapia psicológica, y la terapia cognitivo-conductual en particular.
La terapia cognitivo-conductual involucra enseñar a una persona a desafiar y cambiar sus nervios y así producir pensamientos tranquilos y calmar el cuerpo de los síntomas físicos de los nervios.