Según un estudio, las consecuencias de la obesidad durante el embarazo se extenderían desde la madre a la vida las hijas. Los autores de este estudio lograron ver que las niñas que tienen madres que sufren de obesidad, en comparación con madres de peso normal o más bien bajo, eran tres veces más propensas a empezar a menstruar antes de los 12 años.
Algunas investigaciones previas ya habían arrojado datos de que las niñas con sobrepeso suelen entrar antes en la pubertad y que las hijas de mujeres obesas tienden a sufrir sobrepeso, señaló en la revista Epidemiology el equipo de la doctora Sarah A. Keim, de los Institutos Nacionales de Salud en Bethesda, Maryland.
¿Como se hizo el estudio?
- En este estudio, las hijas de madres obesas se mostraron más propensas a comenzar a menstruar muy tempranamente, «aunque no sufrieran de sobrepeso», dijo Keim a Reuters Health.
- El equipo realizó una entrevista a 597 mujeres, de las edades entre 22 a 32 años, para indagar sobre la edad en la que habían comenzado a menstruar.
Los resultados fueron que:
- 121 mujeres habían tenido el primer período a los 11 años o antes
- 158, 147 y 171 lo habían tenido a los 12, 13 y 14 años o más, respectivamente.
- Las hijas de las mamás que sufrieron de obesidad eran 3,3 veces más propensas a comenzar a menstruar antes de los 12 años que las hijas de mujeres que no sufrieron de obesidad.
- La menstruación a partir de los 12 años fue 2,7 veces más común en las hijas de mujeres que sufrieron obesidad.
- El equipo de investigación no logró hallar una relación que se dieran entre la menstruación precoz en las hijas de mujeres con peso normal o bajo al quedar embarazadas.