Pastillas anticonceptivas y lactancia materna

¿Cuales son las pastillas que deben consumirse cuando se esta amamantando? Las pastillas que son compatibles con la lactancia materna son las que no contienen estrógenos. Esto se debe a que el estrógeno es antagonista de la prolactina, y la prolactina es la hormona que produce la leche.

Por este motivo es que hay pastillas anticonceptivas que son especiales para la época de lactancia, e incluso son utilizadas en mujeres que, aunque no estén amamantando, no pueden recibir estrógenos en sus cuerpos.

 

Pastillas anticonceptivas y lactancia materna

 

Unas de las pastillas mas conocidas para la lactancia son las Carmin, el cual es un anticonceptivo oral utilizado por las mujeres que están amamantando y las intolerantes a los estrógenos como mencionamos anteriormente. Funciona haciendo que no se ovule, por lo cual sin ovulación no hay embarazo posible.

Este anticonceptivo contiene 28 comprimidos, por lo cual no tiene descanso como otras pastillas, y se recomienda que se tome 1 por día siempre a la misma hora para tener una mayor efectividad. En caso de que se olvide de la toma lo mejor es utilizar un método anticonceptivo de barrera como lo es el preservativo.

Durante el uso de estas pastillas anticonceptivas para la lactancia pueden existir irregularidades en lo que es el sangrado menstrual, por lo cual pueden aparecer hemorragias (no se debe suspender la toma salvo que el medico lo indique así), puede darse con menos frecuencia o directamente no tener menstruación.

Lo cierto es que en realidad durante el periodo de lactancia se pueden tomar pastillas anticonceptivas tradicionales, pero lo que sucede es que estas disminuyen la cantidad de leche que se produce, como mencionamos mas arriba.

Por lo general cuando se deja de amamantar se vuelven a tomar los anticonceptivos que se tomaban normalmente y de esta forma vuelven los ciclos menstruales normales, ayudando también a cortar la producción de leche.

Si bien existen muchos mitos sobre la lactancia, lo cierto es que la lactancia materna exclusiva (LME) durante los primeros 6 meses de vida ofrece a los bebés desarrollo, crecimiento y salud óptimos. Igualmente, si se extiende hasta los 2 años de edad sigue aportando múltiples beneficios al bebé y su madre, siempre complementada con otros alimentos nutritivos.

El bebé se vincula de una forma estrecha e intima con su madre, además de ser la alimentación ideal por su temperatura, estar siempre disponible y esterilizada. Es una alimento que el bebé digiere fácilmente, y ayuda a que este protegido contra las infecciones y alergias. En el caso de la mamá disminuye la anemia postparto, ayuda a que se vincule intima y estrechamente con su hijo/a, ayuda a que elimine las grasas acumuladas en el cuerpo durante el embarazo, entre muchos beneficios más.