¿Qué es lo que hace que quiéramos repetir la comida?

Esas ricas papas fritas, o esa carne bien jugosa que parece que se nos desarma en la boca. O ese flan con dulce de leche que nos hace querer volver a comerlo. Es frecuente que sean muy vividos los recuerdos de la comida, y en especial cuando probamos sabores riquísimos o muy malos.

Qué es lo que hace que quiéramos repetir la comida

 

Más allá de esto… ¿qué es lo que nos hace querer repetir?

De acuerdo con un estudio que fue publicado en la revista “Psychological Science” y que cuenta cómo es que funciona la memoria en relación con la comida, y también la forma en que esto guía nuestras decisiones sobre cuando queremos volverla a comer.

Emily Garbinsky y Baba Shiv, pertenecientes a la “Universidad de Stanford”, y Carey Morewedge perteneciente a la “Universidad de Boston”, realizaron distintas investigaciones sobre la relación que tienen las personas con la comida.

Como se realizo este estudio

Para hacer este estudio se les pidió a 134 participantes que degustaran unos 3 sabores diferentes de galletas y que después de esto eligieran cual les gustaba más para comer. Lo que hicieron fue darles un número específico de galletas y se les pidió que calificaran cuánto habían disfrutado de cada bocado.

Lo que lograron descubrir fue que, las personas tienen algo que es conocido como: «saciedad específica sensorial», la cual consta de que cada nuevo bocado es mucho menos placentero que el anterior, y por este motivo es que si la porción es más grande, es menos lo que se disfruta una vez que se termina de comer ese plato.

Según el estudio, el recuerdo que tiene la persona del último bocado de comida que ingirió hace que la persona vuelva a querer ingerir esa comida, y para de comer cuando ya ese recuerdo se muestra menos placentero.

Es por esto que indican los especialistas que: no solo el individuo siente una saciedad física estomacal, sino que siente una saciedad a nivel de la memoria.

Cuando la persona come una porción de tamaño normal, lo que hace es quedarse con ese recuerdo de ese último bocado y lo lleva a que lo repita.

Esto es lo que mencionan Garbinsky y sus colegas, a lo cual denominan: «efecto reciente», lo cual explicaría por qué la memoria tiene que ver con que la comida se repita.

Expresaron los especialistas que: «Un vaso de jugo, un pote de helado o una bolsa de papas fritas contiene muchas unidades de estímulos muy similares que se consumen un trago o bocado a la vez hasta que se ha comido toda la porción»

A esto agrega Garbinsky: «El impacto de lo que come la gente en la salud de las personas no sólo está determinado con cuánta de esa comida -sana o no- consumen, sino la frecuencia con que lo hacen» y que: «Pareciera importante entender mejor qué es lo que influencia en el tiempo que pasa hasta que se repite el consumo».