Tasas de mortalidad

Tasas de mortalidad

Las tasas de mortalidad configuran una medida de la cantidad de muertes (en general, o debido a una causa específica) en una población, a escala en el tamaño de la población, por unidad de tiempo.

Las tasas de mortalidad se expresan típicamente en unidades de muertes por cada 1000 personas por año, por lo que la tasa de mortalidad de 9,5 (de 1000) en una población de 1.000 significaría 9,5 muertes por cada año.

Precisión del término tasas de mortalidad

Es distinto de tasa de morbilidad, que se refiere al número de individuos con mal estado de salud durante un periodo de tiempo (tasa de prevalencia) o el número de casos de nueva aparición de una enfermedad por unidad de tiempo (tasa de incidencia).

El término «mortalidad» es también a veces indebidamente utilizado para referirse a la cantidad de muertes entre un conjunto de casos diagnosticados de una enfermedad o lesión.

Podemos distinguir:

La tasa bruta de mortalidad, el número total de muertes por año por cada 1000 habitantes.

La tasa de mortalidad perinatal, la suma de las muertes neonatales y muertes fetales por cada 1000 nacimientos.

La tasa de mortalidad materna, el número de muertes maternas por cada 100.000 nacidos vivos en el mismo período de tiempo.

La tasa de mortalidad infantil, el número de muertes de niños menores de 1 año de edad por cada 1000 nacidos vivos.

Otra distinción de tasas de mortalidad

En lo que se refiere al éxito o fracaso de un tratamiento médico se distinguen:

La tasa de mortalidad temprana: el número total de muertes en las primeras etapas de un tratamiento en curso, o en el período inmediatamente posterior a un tratamiento agudo.

La mortalidad tardía, el número total de muertes en las últimas etapas de un tratamiento en curso, o luego de un período de tiempo significativo después de un tratamiento agudo.

Estadística y tasas de mortalidad

Entre los países con mayor tasa bruta de mortalidad se encuentran:

Sudáfrica
Rusia
Ucrania
Lesotho
Chad

Utilidad de las tasas de mortalidad

El registro de las tasas de mortalidad puede llegar a ser muy útil en el control, por ejemplo, de epidemias.

Para mejorar la eficacia de la atención de la salud también son fundamentales, por los datos que brindan, las tasas de mortalidad.