Dentro de una revisión de evidencia científica, investigadores lograron encontrar que el estreñimiento puede llegar a ser un generador de otros problemas de salud e incluso conducir al riesgo de problemas mucho más graves, como es el caso de las hemorroides, incontinencia fecal, fisuras, afecciones en el colon e incluso también trastornos urológicos.
Según el Dr. Nicholas J. Talley, quien es el presidente de medicina interna dentro de la “Clínica Mayo” (en Jacksonville), indicó que muy pocas personas saben sobre la seriedad del estreñimiento y esto se debe a que los síntomas van variando desde moderados a incluso graves.
Según indico Talley: «La mayoría de la gente presenta síntomas moderados intermitentes y no debería preocuparse, aunque algunos sí lo hacen de manera excesiva». «Otros sufren en silencio porque da vergüenza hablar de los intestinos».
Las personas que tienen 2 o más síntomas y estos se dan durante al menos 3 meses durante 6 meses o más tiene lo que se denomina como: «estreñimiento funcional».
Los síntomas son:
- Esfuerzo al hacer
- Sensación de haber evacuado de forma incompleta
- Heces apelmazadas o que están duras
- Tener sensación de obstrucción anorrectal
- Tener que realizar manipulaciones manuales para poder ayudar con la defecación y tener menos de 3 defecaciones que son sin ayuda a la semana.
Talley y su equipo de colegas hicieron una búsqueda sobre esta temática y sobre la literatura con el fin de encontrar estudios que fueran importantes y que estuvieran publicados entre los años 1980 y el 2007.
La función que tiene el estreñimiento en el cáncer de colon y en la enfermedad diverticular aun no esta del todo clara, y aunque los estudios de control de caso, en los cuales se compara a un grupo que sí tienen una afección con otro grupo que no la tiene, han logrado demostrar que existe un relacionamiento importante entre lo que son las hemorroides y el estreñimiento.
Según estudios de intervención, en los que se dio un cambio en la dieta y se hicieron terapias medicinales para poder llevar al mínimo el estreñimiento, también son sugerencia de una relación causal. A esto se agregan estudios de pacientes que sufren de prolapso rectal, una enfermedad en el cual el recto se estira y de esta manera sobresale por el ano. Esto también sugiere una relación de este tipo.
Según un porcentaje, más del 50% de los pacientes que sufren de fisuras anales también padecen estreñimiento, y como si fuera poco a esto se le suma la relación causal que hay entre los trastornos urológicos y el estreñimiento.
Más allá de que se cuenta con toda esta información, la cantidad de medicamentos que están aprobados en Estados Unidos por la “Administración de Alimentos y Medicamentos” para el tratamiento del estreñimiento crónico es una lista muy restringida, esto según se indica en el suplemento de la “Journal of Managed Care Pharmacy”. Uno de los medicamentos aprobados y el más nuevo es el Amitiza (lubiprostona), utilizado en casos de estreñimiento crónico.
De acuerdo con las indicaciones de James C. Eoff III, quien es el decano ejecutivo asociado y es también profesor de farmacia clínica en el “Colegio de farmacia de la Universidad de Tennessee” (Memphis): «La lubiprostona parece ser muy efectiva, sin embargo, un porcentaje relativamente alto sufre de náuseas si toma el medicamento con el estómago vacío» y que «Para quienes la toman con la comida, las calificaciones de porcentaje de efectividad son muy buenas».
Según Eoff también existen otras opciones, como un medicamento denominado linaclotida, a esto agrega: “Esta sería una alternativa muy efectiva al tratamiento del estreñimiento crónico»
Sobre lo que es la prevención del estreñimiento, Talley asegura que ha podido observar que si se sigue una dieta bien balanceada, en conjunto con visitas regulares al baño y porsupuesto no se evita la necesidad de hacerlo, esto puede ayudar para prevenir problemas futuros.