Psicodieta

Psicodieta

La psicodieta, como su nombre lo indica, resulta de utilizar la sicología para determinar los comportamientos alimentarios de las personas.

Planteos de la psicodieta

La psicodieta distingue cuatro tipos de comportamientos alimentarios, ellos son: agresivo, depresivo, regresivo y defensivo.

Teniendo en cuenta estos perfiles, se pueden prescribir regímenes adecuados a cada tipo de personalidad.

Se fundamenta en que en el hipotálamo regula el hambre, el apetito y la saciedad. En esto influyen las emociones, desencadenando diferentes respuestas frente a los alimentos.

Es así que las variadas circunstancias por las que atraviesa una persona determinen su comportamiento alimentario.

Clasificación en la psicodieta

Comportamiento agresivo

El agresivo prefiere las comidas que incluyan carne, y aquellas preparaciones fuertes de sabor, aromáticas. Le gusta masticar y por ello también son preferibles alimentos crujientes.

Comportamiento depresivo

El depresivo come compulsivamente. En momentos de soledad o aburrimiento intenta aplacar su ánimo comiendo, en vistas de llenar un vacío que no es resultado del hambre. Le convienen aquellos alimentos que provocan saciedad, tales como arroz, pastas y ensaladas verdes.

Comportamiento regresivo

El regresivo basa sus dietas en el azúcar. Siente que la ingesta de azúcar le da sosiego.

Comportamiento defensivo

El defensivo ve en el hecho de alimentarse, una forma de fortalecerse, de recargar energías. El comer le da fortaleza para enfrentarse al día a día. Necesita en su dieta alimentos energéticos. Debe cuidarse de los kilos de más.

Menús asignados por la psicodieta

Ejemplo de menú para el comportamiento agresivo:

Desayuno: Te con leche y tres tostadas. Media mañana: Yogur con cereales. Almuerzo: Trozo de pollo con arroz. Merienda: una fruta. Cena: Omelette y ensalada de lechuga y zanahoria.

Menú para el comportamiento depresivo:

Desayuno: Leche y galletas de arroz con mermelada. Media mañana: Jugo de naranja. Almuerzo: Pasta con tomate y queso. Merienda: una fruta. Cena: tarta de espinaca y sopa de arroz.

Menú para el comportamiento regresivo:

Desayuno: Leche descremada y dos rebanadas de pan integral con miel. Media mañana: Un yogur Almuerzo: Un filete de pescado y verduras al vapor Merienda: Licuado de frutas. Cena: Tortilla de arroz. Ensalada de frutas.

Menú para el comportamiento defensivo:

Desayuno: Leche descremada con cereales. Media mañana: Licuado de frutas. Almuerzo: Pasta con queso y ensalada verde con tomate. Merienda: Yogur Cena: Verduras con perejil. Ensalada de frutas.

Conociendo estos cuatro tipos básicos de comportamiento frente a las comidas, podemos realizar el régimen que más se adecue a nuestra personalidad, es lo que pretende la psicodieta.